Reunificación de deudas con aval
La reunificación de deudas con aval es una solución financiera para todos aquellos que deseen agrupar todas sus deudas en una única cuota mensual de menor coste. Con esa operación financiera será posible que consigas un plazo de amortización favorable y negocies una tasa de interés atractiva.
Por lo general, los bancos o entidades financieras prefieren una garantía hipotecaria para ofrecer una oportunidad de financiación. Sin embargo, esto sucede en casos particulares: si las deudas denotan un enorme riesgo de impago, o si la persona está inscrita como moroso en el ASNEF.
Si el coste de todas tus deudas no representan una gran carga financiera, puedes pensar en adquirir un préstamo personal. Este tipo de operaciones son rápidas y no necesitan tantos requisitos para su aprobación. Eso sí, el valor de los préstamos personales será menos de lo que puedes conseguir con una reunificación.
¿Cómo funciona una reunificación de deudas?
La reunificación de deudas es un proceso complejo pero simple a la vez. Este producto financiero es facilitado por las entidades bancarias o agencias mediadoras, las cuales financian una solicitud de préstamo para que un deudor consiga pagar todas sus deudas con anticipación. Seguidamente, se abre un nuevo préstamo con hipoteca o con aval, el cual presentará un nuevo costo de interés y un plazo de amortización favorable.
La tasa de interés y el plazo de amortización serán diferentes para cada entidad bancaria. A su vez, la reunificación de deudas requiere, en la mayoría de los casos, una vivienda como garantía de pago o una persona física o jurídica que respalde tu obligación frente al pago.
Requisitos para reunificar con aval de vivienda
Como hemos mencionado, los bancos usualmente prefieren una vivienda como aval para aprobar una unificación de deudas. Por lo tanto, si te interesa este proceso los requisitos más habituales son los siguientes:
Ser mayor de edad. Tener más de 18 años es un requisito fundamental para que cumplas legalmente a la hora de reunificar deudas.
Ser el dueño del inmueble: también es indispensable que la casa esté registrada como tu propiedad.
Que la vivienda esté sin gravamen: es importante que el inmueble se encuentre libre de cargas; es decir, que no esté hipotecada, o al menos, sí lo está, que tenga el 80 % ya liquidada.
Poseer una cuenta bancaria propia: para recibir el préstamo de financiación, lógicamente será necesario que cuentes con tu propia cuenta bancaria.
En el caso de solicitar una reunificación con aval de vivienda, los bancos suelen a acceder a la financiación sin tantas complicaciones. Lo único es que solicitar este proceso de reunificación de préstamos puede ser un camino largo e intricado para muchos.
Lo más recomendable es apoyarse en empresas confiables que guíen desde el inicio hasta el fin de la reunificación.
Documentación a aportar
La reunificación de deudas con aval es un proceso burocrático que implica muchos trámites y conceptos que debes conocer.
Y la documentación que se exige normalmente es la siguiente:
- Documento de identidad (DNI).
- Valor real de la propiedad (tasación).
- Último recibo de IBI.
- Escrituras de la vivienda.
- Justificante de ingresos estables (nómina, alquileres, jubilación, etc.)
Usualmente, las personas que se interesan en reunificar deudas con aval suelen apoyarse en una gestoría que les facilite todo el proceso de los trámites. A su vez, la asesoría de un notario te permitirá conocer todos los riesgos que implica el proceso de unificación con los bancos y entidades financieras.
Preguntas frecuentes
¿Puedo reunificar deudas estando en ASNEF mediante un aval?
No cabe duda que estar fichado como moroso cierra cualquier puerta a la hora de solicitar un préstamo. Sin embargo, existe la posibilidad de que puedas reunificar tus deudas con aval incluso si estás en el Asnef. Es más, las probabilidades aumentan cuando ofreces como garantía un inmueble o asocias a un tercero como fiador solidario en respaldo de tu deuda.
¿Puedo reunificar deudas estando en paro mediante un aval?
Reunificar deudas con aval y sin nómina es más fácil cuando incluyes como garantía una propiedad o a un tercero que respalde tu obligación de pago. Asimismo, también es favorable si cuentas con suficientes ahorros y un historial de crédito sin rastro de impagos.
Ventajas de reunificar deudas con un aval inmobiliario
Los bancos suelen financiar sin tantas complicaciones a las personas que solicitan una reunificación de deudas con un aval inmobiliario. Esa y las siguientes ventajas convierten a este producto financiero en uno de los usados por los españoles:
- Permite hacer una cancelación anticipada de todas las deudas que tengas pendiente.
- Facilita la agrupación de tus deudas para que converjan en una sola cuota mensual.
- El importe mensual es menor a la cantidad total de tus deudas anteriores.
- Generalmente el plazo de amortización es bastante cómodo para pagar sin prisa.
- Es irrelevante que aparezcas en el Asnef como moroso.
- Puedes seguir usando el inmueble que incluyas como aval.
Desventajas de reunificar deudas con un aval inmobiliario
Aunque la unificación de pagos representa una solución a tus problemas de deudas, también es importante que conozcas algunas desventajas/riesgos que implica llevar a cabo esta operación:
- El importe para este tipo de créditos no supera el 40 o 50 %.
- Los intereses suelen ser elevados, es decir, pueden llegar al margen del 20%.
- A la larga terminarás pagando más aunque sea una cuota mensual más reducida.
- Está latente la situación de embargo a tu propiedad en caso de que no puedas liquidar la deuda.
Contacta con nosotros
La reunificación de deudas con aval hipotecario es una de las solicitudes que más se aprueban con facilidad. La agrupación de tus deudas en solo pago mensual representa una oportunidad para que alivies tu situación financiera.
El plazo de devolución del préstamo se extienden en pequeñas cuotas mensuales de menor coste.
Por eso, nuestra empresa ofrece esta solución a las personas que poseen la intención de reducir su nivel de endeudamiento. La reunificación no denota riesgos si sabes cómo gestionar eficazmente tus obligaciones. Al final, nosotros también nos arriesgaremos por ti.